Claves para hallar el contenedor apropiado

Sea para iniciar el transporte de grandes volúmenes como para dar un paso más en el comercio internacional, las transacciones inteligentes deben considerar una cantidad de variables para asegurar los mejores rendimientos con el contenedor apropiado.

Tanto en cuanto a medidas y carga, como a estándares y regulaciones internacionales, encontrar el contenedor indicado para satisfacer los requerimientos del negocio en cada momento atiende a una serie de conocimientos específicos en la materia.

Adquisición y leasing de contenedores

Lo primero que se debe evaluar es el tipo y regularidad con la que se requerirá el uso del contenedor. Esto contribuirá a comprobar que la comparación entre costes y beneficios resulta en ventajas a corto, mediano y largo plazo.

Mientras que la adquisición supone una gran inversión que, posiblemente, afecte la capacidad de financiera o la adquisición de otros activos para mejorar la competitividad del negocio, existen numerosas ventajas en el arrendamiento de contenedores.

Hay diferentes tipos de leasing lo bastante flexibles para diferentes tipos de operaciones, suponiendo además la ventaja de disminuir los costes que supone el desgaste, mantenimiento y depósito.

Características de los contenedores más utilizados

El tipo de contendor que se adapte a las necesidades de carga debe alinearse a las condiciones en las que se realizará el transporte, tanto internacional como nacional o por carretera, considerando el cumplimiento de las regulaciones.

Existen diferentes tipos de contenedores para diferentes tipos de carga así como para diferentes medios o vías de transporte (marítimas, fluviales, terrestres o aéreas).

El tamaño, peso, tanto en cuanto a dimensiones internas y externas, así como las aberturas y los materiales de los contenedores se rigen internacionalmente según las normas de la Organización Internacional para la Estandarización (ISO).

En sus diferentes tamaños, los tipos de contenedores más utilizados son:

  • Estandar Dry Van y HC: contenedores para carga seca utilizados para pallets, cajas, bolsas, máquinas, muebles, entre otros. Construidos en metal, de cierre hermético sin ventilación ni refrigeración. La categoría HC (high cube) tiene un 13% más de capacidad cúbica interna y se destina a las cargas más pesadas.
  • Flat Rack: carecen de paredes laterales y con techo removible, se emplean para cargas atípicas, facilitando el transporte de mucho volumen que incluso puede sobresalir, motivo por el cual, pagan suplementos.
  • Reefer: o contenedor refrigerado, proporcionan el control de la temperatura contando con una fuente de alimentación de energía lo que permite transportar mercancías perecederas, entre otras con temperaturas específicas entre los -18 y los 30 °C.
  • Jaula: de tipo estructural, caracterizado por ser ligero y apto para cargas pesadas gran volumen.
  • Open Top: abiertos en la parte de arriba con techo removible de lona que facilitan el transporte de mercancías de gran volumen.
  • Pallet-Wide: con un ancho especial ligeramente superior al estándar que permite optimizar al máximo el espacio interior para una carga exacta de pallets.

Para las cargas aéreas existen también diferentes tipos de contenedores que se adaptan específicamente al tipo de aeronave en la que se realice el transporte.

Contar con un operador logístico especializado y con amplia trayectoria en el comercio internacional redunda en beneficios, con el asesoramiento integral que permite hallar el contenedor apropiado y las condiciones de contratación a la medida de las necesidades del negocio en cada momento.