Carga sobredimensionada – qué es y cómo transportarla por mar

El transporte marítimo es la principal vía de importaciones y exportaciones de productos a lo largo y ancho del mundo. Por lo tanto, es necesario establecer regulaciones y protocolos para las diferentes clases de cargas que se transportan. Entre las clasificaciones más releventes y conocidas, se encuentran las mercancías peligrosas, las mercancías perecederas y la carga sobredimensionada. Esta última cuenta con sus propios mecanismos de exportación. En este artículo los abordaremos y os informaremos todo lo que necesitáis saber acerca de este tipo de carga al momento de embarcarla y exportarla.

¿Qué es la carga sobredimensionada?

Se entiende por carga sobredimensionada a todas aquellas mercancías cuyo tamaño o tonelaje las excluye de poder ser transportadas de forma convencional. Por ende, no es posible exportarlas en contenedores estándar. Por lo tanto, a los efectos de trasladarlas, es necesario recurrir a equipos especialmente diseñados para manipularlas de la forma adecuada.

Por consiguiente, debido al peso o al tamaño, ciertos tipos de materiales necesitan ser preparados en envíos especiales. De esta forma, el proveedor puede asegurarle a sus clientes que la mercancía llegará de forma segura y en las condiciones requeridas.

Sectores que requieren de este tipo de carga

La carga sobredimensionada o pesada es casi terreno exclusivo del sector industrial. Entre los ejemplos de maquinaria más común encontramos las grúas, los motores a gran escala, las excavadoras y la maquinaria destinada a la agroindustria.

Por otra parte, nos encontramos con los proveedores de materias primas de gran peso. Es así que las marmoleras y las empresas que proveen de piedras naturales a constructoras, también requieren exportar sus productos en calidad de carga sobredimensionada.

Las mercancías peligrosas, tales como tóxicos, explosivos y productos radioactivos, también necesitan de un tratamiento especial a la hora de trasladarlos por mar. La clasificación IMO es la regulación que las categoriza y marca las pautas de cómo exportarlas.

Por último, existe un conjunto de empresas que también exportan sus mercancías bajo la modalidad de carga sobredimensionada o pesada, las cuales pertenecen al sector petroquímico, al de las energías renovables y al de la minería.

¿Cómo se traslada la carga sobredimensionada?

Cuando las mercancías a exportarse exceden las dimensiones estándares para el traslado convencional, tenemos las siguientes dos opciones para llevarlas por mar de una orilla a la otra:

Open top container

Debdo a sus más de 2 300 milímetros de altura, tanto en su presentación de 40 pies como de 20 pies, este contenedor es perfecto para el traslado de mercancías que cuentan con sobrealtura. A su vez, es muy sencillo deslizar las mercancías dentro de él porque utiliza el sistema de puente grúa, ideal para la carga de mercancías pesadas.

Contenedor de plataforma

También conocido como flat rack container, el contenedor de plataforma consiste en una base que carece de paredes y de techo. De esta forma, se elimina el problema de los extremos abatibles. Por consiguiente, es el contenedor ideal para transportar mercancías cuyas dimensiones exceden el alto o el ancho del contenedor, las cuales son imposibles de trasladar en contenedores estándar.

Mercancías que no pueden transportarse en ningún contenedor

Algunas veces, la carga sobredimensionada no puede ser transportada en ningún tipo de contenedor. En tales casos, se procede a estibar las mercancías directamente sobre el piso de la bodega del buque. Otra opción es utilizar las plataformas MAFI, las cuales cuentan con ruedas. No obstante, optar por ellas dependerá del tipo de buque en el que se efectúe el traslado, ya que esta clase de plataformas solo puede ser utilizada en buques RORO, puesto que estos han sido diseñados para transportar mercancías sobre plataformas con ruedas.

Te recomendamos este interesante artículo acerca del contenedor plataforma y de sus usos.

 Buques RORO – la solución para grandes cargas

Cuando la carga sobredimensionada no puede transportarse en los contenedores pensados para este tipo de exportación, se recurre a los buques RORO. Su acrónimo hace alusión a roll-on / roll-off, debido a la forma en la que se embarcan las mercancías sobre ellos. Dichas embarcaciones tienen puertas de entrada de importantes dimensiones. Estas se encuentran tanto en la proa como en la popa, puesto que es a través de ambas que se procede a cargar y a descargar las mercancías.

Por otra parte, estas embarcaciones suelen contar con rampas. Gracias a ellas, delizar las mercancías hacia adentro y hacia afuera del buque resulta una tarea rápida y sencilla.

Otra de las diferencias que plantean los buques RORO es la forma en la que se mide su carga. Usualmente, las cargas de los buques se miden en la unidad de toneladas métricas. En cambio, los buques RORO las miden en LIMs, o carriles en metros. Para calcular el LIM de la carga sobredimensionada, se multiplica la longitud de esta en metros por el ancho que ocupa en los carriles y por el número de cubiertas.

Diferencia entre carga pesada y sobredimensionada

La carga pesada se refiere a aquellas mercancías que pesan más que la media. Sin embargo, entran en una unidad de transporte, la cual es el contenedor. En cambio, la carga sobredimensionada no cabe dentro de las medidas del contenedor estándar. Por ende, esta última necesita de los contenedores open top o del contenedor de plataforma. No obstante, las mercancías pesadas requieren del contenedor open top.

Otra opción para el transporte de mercancías pesadas es recurrir al buque heavy lift. Esta clase de buque pertenece a la categoría de los semisumergibles y puede transportar hasta 110 000 toneladas. Además de poder transportar cargas en extremo pesadas, este buque, según su fabricante, también puede servir como dique flotante.

El transporte marítimo como la estrella de las exportaciones

Debido a su versatilidad, el transporte marítimo es el más elegido para el transporte de las exportaciones a gran nivel. Por dicha razón, necesita de reglamentos y protocolos para lidiar con la amplia gama de cargas que debe trasladar.

Por otra parte, el transporte marítimo también debe sujetarse a regulaciones. Cada vez estas son más estrictas con respecto a la emisión de gases invernadero.

Las compañías navieras de transporte se han visto obligadas a adaptarse a las nuevas reglamentaciones y exigencias. Estas fueron impuestas tanto por las organizaciones ambientalistas como por el propio mercado de consumidores.