Más rápido y más barato

 

A pesar de las nuevas inversiones en países con mercados en crecimiento, una cuarta parte de las instalaciones portuarias de APM Terminals se encuentran en Europa y Estados Unidos, donde el crecimiento es más lento. Enfrentar nuevos desafíos operativos, como buques más grandes, significa que un mejor rendimiento, mejores productos y servicios en estos mercados que son más importantes que nunca.

Atrás quedaron los días en que los terminales de envío de contenedores esperaban a que llegara la carga y se concentraban solo en mover y sacar las cajas de manera eficiente.

El nombre del juego es “Más rápido y más barato”. Sin embargo, para sobrevivir, estos terminales también debe buscar nuevos negocios o encontrar otras formas de ahorrar tiempo o dinero para los clientes.

MaerksLine y APM Terminals

Un ejemplo principal de este esfuerzo es el programa de asociación de hub con Maersk Line, el mayor cliente de APM Terminals.

En el envío marítimo, al igual que en la industria de las aerolíneas, ciertas ubicaciones de «centros» anclan las redes mundiales. Para Maersk Line, los tres puertos centrales principales son Algeciras en España; Tánger en Marruecos y Rotterdam en Países Bajos.

En estos puertos, el rendimiento operacional de la terminal es crítico para Maersk Line. Cualquier demora puede causar estragos en toda la red global de buques y costarle millones de euros. Pero como operador portuario, APM Terminals también tiene sus propios resultados finales, lo que significa que las prioridades de las dos compañías a menudo no se encuentran alineadas.

Con el acuerdo de asociación del hub, es otra historia. A cambio de centrarse exclusivamente en la productividad y el rendimiento en Algeciras y Tánger, Maersk Line paga a APM Terminals los costes operativos de las dos terminales en Algeciras y Tánger. El personal operativo de ambas compañías comparte el espacio de oficinas en la región y la administración ha compartido los ‘KPI’ en los que se mide su desempeño. Un sistema de bonificación compartido recompensa cualquier rendimiento por encima del objetivo.

Como resultado directo de la asociación, Maersk Line ahorró varios millones de dólares en costes de búnker años atrás y ha visto mejoras de productividad en ambos puertos.